"LOS ADIOSES"*

" Quisiera no haberle visto más que las manos, (......)
me hubiera bastado aquellos movimientos sobre la madera (.......) para saber
que no iba a curarse, que no conocía nada de donde sacar voluntad para curarse."

" El último año debió haber sido aquel en que me dí cuenta de que la cosa había empezado.
Sín alegría, pero excitado, pude explicarme la anchura de mis hombros y el exceso de
humillación con que ahora los doblaba, aquel amansado rencor que llevaba en los ojos y que
había nacido, no sólo de la pérdida de la salud, de un tipo de vida, de una mujer, sino, sobre
todo, de la pérdida de una convicción, del derecho al orgullo. Había vivido apoyado en mi cuerpo, había sido, en cierta manera, mi cuerpo."


*fragmentos, Juan Carlos Onetti 1909-1994.